Sobre el productor:
La historia de Tagel Alamayehu, fundador de Olkai y coordinador de la estación Hambela Goro, es tan inspiradora como el café que produce. Su padre fue una figura legendaria en Guji, productor y comerciante que levantó la primera estación de lavado en Bule Hora a comienzos de los años 2000.
Tras perderlo todo y declararse en quiebra, Tagel se propuso recuperar las tierras familiares. Años más tarde lo consiguió, y en 2018, cuando el gobierno etíope facilitó las exportaciones con una nueva legislación, fundó Olkai, con la que hoy colaboramos estrechamente.
Hambela Goro trabaja con 460 pequeños productores que cultivan la variedad 74110 a una altitud excepcional de 2.300 msnm.
La mayoría de ellos posee apenas unas cientos de plantas, lo que convierte los lotes en auténticas mezclas multicomponente llenas de matices. A pesar de ello, la consistencia y calidad del café son sobresalientes año tras año.
Más allá de la producción, Olkai destaca por su compromiso social: paga precios por encima del mercado, distribuye plántulas anualmente y apoya la construcción de escuelas e infraestructuras básicas para las comunidades con las que trabaja.
Sobre el café:
Las cerezas se recolectan en su punto óptimo de maduración y se someten a un riguroso proceso de selección manual.
Tras el despulpado, el café se fermenta durante 48 horas en agua y luego se seca en camas africanas durante 10 a 12 días, según el clima y la humedad.
El resultado combina terroir, altitud extrema, la variedad 74110 y la dedicación de los productores en una sinergia perfecta: un café lavado complejo, con notas florales y cítricas, y una dulzura profunda de fruta de hueso.
Una verdadera expresión del espíritu y la excelencia de Guji.
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